The Heart Never Lies Capítulo 17

Capítulo 17.- Tarde de fiesta.

         -Creo que ha sido una mala idea Dan- dije Doug.

         -Claro, porque no puedes estar morreándote con ella delante de todos.

         -No lo entiendes.

         -Doug, que Tom se va a casar, seamos sensatos, si hubiera querido algo con ella lo habría intentado hace mucho.

         Yo me reí ante la ocurrencia de Danny, llevábamos muchos años de amistad y eso era todo lo que teníamos, porque para mí Tom era como ese hermano mayor que nunca tuve.

         -Apóyate tú en mi hombro- le dijo Harry a Dougie, apoyándole la cabeza y él puso resistencia. Yo me reí.

         -Lo que pasa es que tiene envidia de que el hombro de Tom es más cómodo que el suyo- dijo Danny.

         -¿Lo has probado?- le preguntó Harry.

         -Faltaría más.

         -Ya sabes que a mi me gusta tu hombro- le dije a Doug.

         -¿Más que el mío?- preguntó Tom, fingiendo sentirse ofendido.

         -Pues claro que más que el tuyo, el tuyo le tiene que gustar a Gio- dijo Doug.

         Gio y yo nos reímos.

         -Te ha tenido que ir a gustar el miembro más delgado de todo el grupo- me dijo Danny.

         -A mí me gusta más así- le dije sonriendo.

         -No me podéis separar de ella ahora joder- dijo Dougie revolviéndose.

         -Se siente… No vamos a estar de sujeta velas de la parejita.

         Todos los presentes nos resignamos a las órdenes impuestas por los recién llegados y Tom reanudó la película, pero Danny pidió que la volviera a poner, porque no se enteraba, aunque el resto aseguraba que ya la había visto.

         -¿La habías visto o no Dan?- le preguntaron cuando acabó la peli.

         -No me acuerdo.

         -Eso es porque eres un muggle- dijo Tom.

         -Venga, os estoy vacilando, claro que la había visto, solo quería joder un rato.

         -Como siempre- dijo Doug.

         -¿Qué has dicho enano?- dijo pasando por encima de Gio para pegarle.

         -Chicos venga, dejarle- dijo Gio.

         -Vale, por hoy pasa, tiene que ser muy duro que tu novia vea como te machacamos.

         -En realidad es porque Gio os lo ha dicho.

         -¿Quieres que demuestre que no es así?

         -¿Queréis dejarme sin novio tan pronto?

         -No estaría mal, pero necesitamos el bajo del grupo, así que saldrá vivo. Bueno, ¿empezamos la fiesta?

         -Para ti cualquier excusa es buena para montar una fiesta- dijo Tom

         -Ya sabes que sí. ¿Dónde tienes el alcohol?

         -¿De verdad no lo sabes de sobra ya?

         -En la cocina vale. Anda Harry, ven y ayúdame- le dijo Danny mientras ambos salían por la puerta de la sala, dejándonos a nosotros solos.

         Yo me levanté, fui hacia Dougie y me senté sobre sus piernas. Tom se levantó detrás de mí y se colocó al lado de Gio, dándola un beso en los labios.

         -Ya estaba empezando a sentirme celosa- le dije de broma mientras me rodeaba con sus brazos.

         -¿De Harry? No te preocupes, todavía no ha superado que tenga novia.

         -Me dejas más tranquila.

         -Oye, ¿de verdad que te gusto más así delgadito, con estos palillos que tengo por brazos?

         -Pues claro que sí tonto, me gustarías aunque fueses una bola andante y no digas eso de tus brazos porque es mentira.

         Acerqué mi cara a la suya y ahora sí, le dí un beso en los labios, pero Danny y Harry no tardaron en aparecer para interrumpirnos.

         -¡Iros a un hotel!- dijo Harry.

         -Lo que tardamos en irnos nos quitáis el sitio.

         Doug y yo nos separamos y me bajé de sus piernas para sentarme a su lado.

         -Ahí tenéis el otro sofá y cabéis de sobra los dos- dijo Doug.

         Danny y Harry, que cada uno llevaba tres vasos enormes llenos, nos dieron uno a cada uno.

         -Creo que esto es mucho- dijo yo que era consciente de lo mal que me sentaba el alcohol.

         -Venga, si la mayoría es hielo. Quiero que no quede ni una gota- dijo Danny.

         Los primeros en acabarse el vaso fueron ellos, que se lo acabaron en prácticamente un trago. A mí y a Gio nos costó un poco más.

         La verdad es que, como había dicho Danny, la mayoría era hielo y al acabarlo no estaba tan borracha como me imaginaba, todavía podía controlar lo que hacía.

         Después de tomarnos la bebida Danny puso la radio y una música tecno comenzó a sonar. Los chicos comenzaron a hacer un baile de lo más divertido mientras Gio y yo nos reíamos sentadas en el sofá. Al parecer mi risa, encadenó que Danny se riera de forma escandalosa y contagiosa, por lo que los que quedaban por reírse no pudieron evitar hacerlo.

         Gio y yo nos acabamos uniendo al baile y bailamos con todos. La mejor parte era cuando los chicos intentaban bailar entre sí coordinadamente, cosa que era bastante complicada.

         Ya se había hecho de noche, y aunque me estaba divirtiendo bastante, había madrugado y los párpados se me empezaron a cerrar sentada en el sofá al lado de Gio, que se había quedado dormida hace un rato. A pesar de tener los ojos cerrados seguía despierta y escuchando las voces de los demás, que en cuanto se dieron cuenta de nuestro cansancio quitaron la música.

         -Shh… Se han quedado dormidas- dijo Tom.

         -Pues sí que aguantan poco…

         -Ash hoy ha tenido que madrugar y ya son más de las tres. Mañana todavía tiene que trabajar- dijo Doug, pude reconocer- Creo que voy a llevarla a la cama.

         -Yo también- dijo Tom refiriéndose a Gio-. Si queréis podéis quedaros a dormir aquí.

         -No tranquilo, nos vamos a casa.

         No pude oír más de la conversación porque unos brazos me elevaron y salimos de aquella habitación. Intenté abrir los ojos, pero a penas lo conseguí. Noté como me dejaba cobre mi cama y me quitaba los zapatos y los pantalones. El roce de sus manos con mi piel me provocaba escalofríos.          Noté como me tapaba con la sábana, y antes de que se fuera, superando mi cansancio, abrí los ojos y hablé.

         -No te vayas… Quédate aquí conmigo.

         -Pero…

         -Por favor.

         Me hizo caso y tras desnudarse y quedarse solo con los boxers se tumbó a mi lado. Volví a acariciarle suavemente el abdomen como la noche anterior y cerré los ojos, pero él se aproximó a mí y me besó. Yo le seguí pero no con la misma intensidad, estaba demasiado cansada.

         Dejó mi boca para descender por mi cuello mientras me acariciaba por todas partes. Yo suspiré y, sin poder remediarlo, me quedé dormida entre sus brazos.

Holis polluelos. Bueno, os dije que iba a subir ayer, pero es que me puse a pasarlo y con twitter que es un vicio y todas las cosas pues al final no había escrito ni un cuarto de página, así que aquí tenéis este capítulo un poco mierdoso y corto, pero es lo que tocaba, el siguiente va a ser un poco más largo (ya os dije que tengo el fic prácticamente escrito entero, me queda el epílogo) Espero que os guste este capítulo y ya sabéis, comentar, que si veo muchos comentarios y demás pues incluso, para compensar, os subo otro esta tarde SI PUEDO, si no ya sabéis que mañana subo. @DearWeirdMaria se despide de sus polluelos lectores.